20230405 ¿ERA NECESARIO “TANTO”?

Los cristianos venimos transitando la cuaresma… que es, en teoría, el tiempo de mayor reflexión del año…

Seguramente no habrá diferencia para Dios si reflexionamos sobre nuestra espiritualidad en cualquier otro momento, de hecho, en cada celebración de la Eucaristía “podemos/debemos” revivir la pasión-muerte-RESURRECCIÓN de nuestro Señor (“este es el misterio de nuestra fe…”).

Pero Jesús, consciente de nuestra “dispersión” por TANTOS otros intereses… y prioridades… nos dejó TANTOS “mansos recordatorios”… que están ahí… sin imponerse… solo para el que quiera reflexionar, para el que quiera tomarlos…

Alguien podrá decir: “no soy cristiano, no tiene sentido seguir leyendo… este escrito no es para mi”. La realidad es que las “creencias del cristianismo” incluyen milagros y misterios sobre los que todos tenemos derecho a dudar… PERO, TODAS las enseñanzas de Jesús COINCIDEN con el derecho natural, que no es más que la distinción que hacemos, TODOS los seres humanos, todos los días, entre lo que está bien y lo que está mal… por el solo hecho de SER seres humanos.

Pienso que sería incoherente, que un Ser Superior creara a un hombre/mujer que naturalmente estuvieran orientados hacia ciertos principios, y que luego ese mismo Ser Creador, les exigiera que defendieran otros valores diferentes a los que le fueron incorporados en su esencia…

Allí encuentro otro fundamento para mi fe personal, que necesito que siempre vaya alineada con la razón (no podría creer en algo que no me resulte razonable): las enseñanzas de Jesús están alineadas con el sentido común del derecho natural… sería como que Él vino a recordárnoslas, a ayudarnos a evitar tantos “confundidores” (espejitos de colores que nos CIEGAN)… BÁSICAMENTE, que si estamos orientados al amor (EL AMOR ES DAR) que no nos apartemos de lo que somos, de nuestra esencia… que es cuando procedemos en forma egocéntrica…

Básicamente, Jesús se pasa ejemplificando las distintas formas de amar o de ser egocéntricos…

Amor o/vs egocentrismo… nosotros ELEGIMOS en cada momento.

¿ERA NECESARIO MÁS?

¿No era suficiente solo con haber transmitido esos conceptos… y listo… ya retirarse a una vida tranquila… y morir de “viejo”?

Durante 3 años, Jesús, desde la MÁXIMA humildad, deja un mensaje UNIVERSAL (por eso nos llamamos católicos).

A su vez, hay personas (algunos llamados por Él, otros que se van acercando) que permanecen más a Su lado, durante toda Su prédica… apóstoles, discípulos, como queramos llamarlos…

Cuando Jesús va anunciando Su partida, esos “cercanos”, interpretan que deberían tener “ciertos beneficios personales (ciertos privilegios)”…

Acomodarnos… “el mérito” de haber sido los privilegiados de estar cerca de Él…

¿cual mérito?

Jesús vino a cambiar “la ley del mérito”, por la LEY DEL AMOR, o sea, amar a TODOS por IGUAL, aunque “no hayan hecho méritos suficientes“… Nunca habla mal del mérito en sí mismo, pero JERARQUIZA el amor por sobre el mérito… algo así como el mérito de amar, por sobre “TODOS los otros méritos”…

Sin embargo, quienes están MÁS cercanos a Él se confunden… y quienes creemos estar MÁS cercanos a Él, también nos seguimos confundiendo…

Luego de 3 años de enseñanzas simples y claras, ¿que MÁS faltaba decir?

¿No podría haberse simplemente retirado?

¿PORQUÉ este final… que antes que llegue “el momento”, Él va esquivando fácilmente?

¿ERA NECESARIO pasar por algo TAN tremendamente duro?

Humildemente CREO que la Semana Santa ES para aquellos que estaban MÁS CERCA a Jesús… aquellos que creemos que estamos CERCA…

No excluye a quienes “NO creen”, porque las “puertas” siempre están abiertas, y si eligen acercarse, la SEMANA SANTA también los incluirá…

Muchas veces pensamos: “si yo viera a Jesús, personalmente, CREERÍA de una…”

¿cuantas veces vemos… o nos pasan tantas cosas que ELEGIMOS “no ver”, no darles trascendencia, “dejarlas pasar”, que no nos impacten?

¿Acaso somos un poquito “mejores” que aquellos que estuvieron físicamente a Su lado? ¿O somos algo distinto a “hasta que no meta mi dedo en Sus llagas…”?

Ojalá pudiéramos ver, y fuéramos algo mejores en la humildad del amor… Hay seres humanos que han logrado esa entrega AL AMOR (con sus fortalezas y debilidades)… elegimos recordarlos como santos, para tener presente SUS EJEMPLOS (más que para estampitas, celebraciones, o pedir favores…)

El mensaje de la Semana Santa (pasión/muerte/RESURRECCIÓN de Jesús de Nazaret, históricamente documentado) ES universal… SI QUEREMOS, todos podemos vernos representados… pero humildemente, creo que EL MENSAJE más fuerte, más dirigido, ES para los cercanos, para los que nos sentimos cercanos…

Podemos representarnos TODOS:

- Por un lado, hay una gran multitud indiferente… a la que le da lo mismo… algo socialmente interesante o intrascendente… según los humores del momento…

- Una parte de esa multitud se involucra en el “show”… espectadores de “alguna sensación” que esos momentos puedan aportarle… o tal vez, “no valió la pena… perdí el tiempo”.

- Por otro lado, hay otros que no son espectadores… sino verdaderos PROTAGONISTAS.

La llamada Semana Santa recuerda un hecho HISTÓRICO CONCRETO, igual que el 2 de abril recuerda la reconquista de las Islas Malvinas, o el 12 de octubre el descubrimiento de América… Luego, podemos “usar” esas fechas recordatorias de distintas formas… acá igual.

Faltan 10 años, para que se cumplan 2000 años, de que un Hombre que nació en Nazaret y predicó en Galilea, fue juzgado, torturado y muerto en cruz… la fría historia.

Los detalles de toda esa vida “pública”, fueron escritos inicialmente para quienes CONVIVIERON con Él, o sea, como “recordatorio” de los testigos, de quienes vieron o estuvieron cerca de aquello que se escribió, conocido como el Nuevo Testamento… cumpliendo anuncios del Antiguo Testamento, escrito en un período de más de 1600 años, por personas que no se conocían entre ellas…

¿Dónde o en quien/quienes podemos elegir vernos representados por aquellos que les tocó vivir ese tiempo histórico?

¿En la multitud indiferente, o en alguno de los “protagonistas”?

¿Era necesario que uno de Sus “más cercanos” lo entregara?

Momentos antes, el mismo Judas Iscariote le pregunta: “¿seré yo?”.

A veces procedemos con “imprudencia consciente”, o incluso, hasta con maldad; pero cuantas veces “entregamos a Jesús”, y recién después caemos en la cuenta que procedimos egocéntricamente… “que si hubiera reflexionado un poquito mejor… un poco antes… no hubiera terminado haciendo esto o aquello…” ¿Cuantas veces estuvimos AL LADO del Bien, y no lo vimos, no lo caímos en cuenta… pero a la mínima “provocación”, terminamos reaccionando según nuestro único interés, egocéntricamente, y “entregamos a Jesús por unas monedas”…?

¿Era necesario que aquel que Jesús había elegido como “piedra” de Su Iglesia, lo negara tres veces, frente a Él, y habiéndoselo anticipado?

Cuantas veces interpretamos que “hicimos méritos suficientes” para ocupar “X” lugares, sin darnos cuenta que “ESOS LUGARES” deben ratificarse con humilde amor cada día… en cada minuto… una ACTITUD de vida… Pedro necesitó vivir la INTENSIDAD de ese momento, para darse cuenta, para poder RECONOCER cuánto dependía de sus propias fuerzas, y cuanto de ENTREGARSE a la Providencia del Espíritu Santo… Esa angustia de vivir el abandono a su maestro en el momento difícil, en carne propia, con tanta crudeza, le permitió ENTENDER luego… y así pudo DAR TESTIMONIO de lo que había entendido…

Pedro, en la angustia, entendió el mensaje de un Amor infinito, que perdona sin necesidad de “méritos”, y humildemente se sintió perdonado…

Judas, no pudo salir de su “lógica del mérito”… lo invadió la desesperanza de creer que ESO, no podía ser perdonado… por eso se dice que una de las mayores debilidades del cristiano es la DESesperanza… el negarnos a participar de la ley del amor, e insistir en la ley del mérito, como único y último estado…

¿Era necesario que TODOS los apóstoles se apartaran y Lo abandonaran… quedando solo mujeres y aquel más joven?

El enorme sufrimiento de la pasión de Jesús, como verdadero hombre, es intensamente físico, pero también intensamente espiritual… como verdadero hombre se sintió solo y abandonado por sus más cercanos… ya le había tocado algo similar al momento de nacer, ahora, como verdadero hombre, puede cuestionarse si “algo” de todo eso, valió la pena… cuánto dolor y cuánta angustia… 🙏🏻🙏🏻

¿Era necesario un “juicio” de esas características, involucrando al poder civil y religioso… “perdiendo” la posibilidad de “zafar” por sobre un delincuente llamado Barrabás…?

¿Era necesario una tortura de tal magnitud y ensañamiento… podría haber sido “simplemente decapitado”?

¿Era necesario que Él mismo tuviera que llevar la cruz, y que muriera en medio de ladrones?

Nos gusta “tener la precisa”… a veces sentimos que lo necesitamos para sentirnos “más seguros”… ¿SE NOS OCURRE pensar cómo habríamos “armado el show”, si nosotros hubiésemos sido los “directores” de esta película… que tenia por misión IMPACTAR al mundo?

¿Cual hubiera sido “nuestro guión”?

¿Nacido en la soledad y abandono… infancia desapercibida con familia sencilla… predicar rodeado de personas sencillas, y SOLO con mensajes simples y comprensibles para todos… un final de vida que expone las formas de reacción según la manera en que nos estamos comportando los humanos…?

¿Cómo habría sido “nuestro” guión, y QUE LUGAR nos habríamos reservado para nosotros mismos, en la representación de esta “película”, con nuestro propio guión?

¿Que QUERRÁ DECIRNOS DIOS, con la forma en la que fueron los hechos de la Semana Santa?

¿Podría ser que esta Semana Santa, de esta forma como le tocó vivir al Jesus Hombre y Dios, haya sido la EVIDENCIA necesaria para que luego Sus apóstoles y discípulos estuvieran “preparados” para comprender LA RESURRECCIÓN y la permanencia con ellos del Espíritu Santo? 

¿Cómo Interpretamos, o qué pensamos, que significaron TODOS ESOS HECHOS para cada uno de nosotros?

¿Creemos que solo se trata de una historia más… o podemos llegar a interpretar que ALLÍ había un mensaje para cada uno de nosotros?

¿Era necesario “tanto”?