jueves, 31 de diciembre de 2020

20201231 aborto, Religión, Convivencia Social.

He recibido mensajes de apoyo luego de la cobarde ley de aborto. Con la mejor intención, muchos interpretan que me afecta especialmente por un tema de compromiso religioso...

Me gustaría hacer un comentario sobre “religiosidad y aborto”.

 

Primero, ¡GRACIAS!  Tanto por los mensajes de consuelo, como por asumir que tengo un compromiso religioso... lo agradezco de corazón, pero en este caso, mi motivación va por otro lado…

 

Te cuento un poco cómo lo veo:

 

Pienso que todo esto es mucho más que el aborto en sí mismo... a veces algunos interpretan que uno fuera un “fanático religioso”... 

Sin aplicar la palabra “fanático”, ojalá yo fuera más respetuoso de la mayoría de las pautas morales que plantean las grandes religiones... o que también se auto-imponen muchas buenas personas que se denominan “agnósticas”... que no creen en un Dios, pero si en respetar valores.

 

Por supuesto que yo no podría profesar una religión que se contraponga con la ley natural, y las pautas morales que, lo más honestamente posible, asumo que debo cumplir, y ayudar a cumplir...

Resulta obvio que la religión que profeso nunca podría aceptar “interrumpir” la vida de otro ser humano, menos aún “porque no sea deseado”, en cualquier momento de su existencia (en la semana 1, la 14 o la 739...) y claro, ADEMÁS mi religión, incluso, VA MÁS ALLÁ... dice que no solo no debo “interrumpir” su vida, sino que debo amar a todos mis semejantes, que en ellos debo ver al Dios en quien creo (sin verlo materialmente), y que ese amor debe incluir a los que no deseo...

Desde lo racional, mi religión me pide un compromiso que RESOLVERÍA muchísimos problemas humanos, que nos haría vivir en un mundo mucho mejor... ¿ideal? (yo CREO que si... aunque me vean muy naif…)

Entiendo que haya gente que no comparta mi fe, pero me cuesta entender que haya gente que se oponga a que otros profesen una religión que busca el bien común... y que cuando no cumplimos, debemos confesar que no lo estamos haciendo bien...

Soy el primero en no cumplir bien... con los años fui aprendiendo lo que cuesta “perder cierto tipo de privilegios” y posicionarnos en un lugar de humildad, donde nuestra felicidad surja de ayudar a, o de ver FELIZ al otro... y no te cuento si justo ese otro no me caía muy bien que digamos...

 

Pero, en mi caso personal, nunca me involucré en el tema aborto motivado por un tema religioso.

En ese aspecto, tengo la conciencia tranquila. Jamás abortaría, ni ayudaría a alguien a abortar, ni promovería el aborto... mi preocupación religiosa me lleva por otros análisis de consciencia, otros aspectos que debo mejorar.

Entiendo que “LA RELIGIÓN” es MI RELACIÓN con Dios... entiendo que Dios ES amor, y que como no puedo verlo materialmente, me pide que lo vea EN los demás... por lo tanto, puedo ayudar y dejarme ayudar... pero NO PUEDO exigir... en todo caso, puedo ser un buen ejemplo y dar testimonio del bien... debo MADURAR desde el egocentrismo del que exige, hacia la humildad de quien se da por los demás...

El humilde no se para primero en la fila para recibir, sino que, entendiendo su real capacidad, se pone primero en la fila para ayudar… y cuando lo logra ES FELIZ. Para ser humilde ES CONDICIÓN ser realista, JAMÁS relativista.

 

Después, es muy claro que muchos que nos llamamos católicos dejamos mucho que desear al intentar cumplir esas pautas... pero no es en los que fallamos donde se debe evaluar el CRISTIANISMO, sino en LA PROPUESTA de su creador... y cómo Él cumplió lo que vino a enseñar.

Pero gracias a Dios, mi “conciencia religiosa”, en lo que a mi respecta, está muy tranquila respecto al tema aborto. 

Mi preocupación va por otro lado... más por la CONVIVENCIA SOCIAL, por la necesidad de crear consensos que respeten prioridades. 

Al aprobarse una ley nefasta, por la cual luché para que no prospere, no siento una derrota en el plano personal, internamente sigo sintiéndome muy firme respecto a ese tema… Si siento que PERDIMOS MUCHO como sociedad.

 

El “aborto” es emblemático, porque en mi humilde opinión, no solo es el peor crimen que pueda cometerse (sobre el ser más indefenso y saludable, con el máximo agravante del vínculo), sino que, la muerte de un hijo, es también el golpe afectivo más fuerte que puede sufrir un ser humano...

Que no reaccionemos frente a eso, demuestra hasta dónde tomó poder el relativismo... no en una sociedad imaginaria... sino en cada uno de nosotros (obvio que, sin hacer referencia a alguien en particular, pero si a los pequeños grupos sociales que cada uno integra).

 

Interpreto que el máximo logro social del ser humano fue madurar una justicia social que defienda al más débil, en cualquier ámbito... 

Y el máximo retroceso es el relativismo, ya que, si se pierden esas pautas morales adquiridas comunitariamente por consensos ancestrales, y en muchos casos con grandes sacrificios, se retrocede nuevamente al poder del más fuerte... si todo es relativo, siempre se impone el que tiene más poder.

 

Por eso, no defender la vida de un tercero, INOCENTE, habla del nivel de nuestra REBELDÍA social hacia lo que debemos hacer, hacia los VALORES que debemos defender... no solo para tranquilizar nuestra conciencia, sino para generar un cambio verdadero.

 

En 2015, alrededor de un 3% de la población votó por plataformas que llevaban al aborto como propuesta.

En 2020, según encuestas, entre el 60-70% está en contra de una ley de aborto, y muchos más dicen que ellos nunca abortarían, sólo que lo considerarían como una opción en situaciones especiales... SIN EMBARGO, en 2019 el 97% de la población votó fórmulas presidenciales con las cuales el aborto era factible...

No es fácil, porque se entremezclan muchas variables... tal vez, nuestra mayor dificultad es que pensamos en forma similar a “la mujer golpeada”, que piensa que luego “lo va a poder cambiar”... no percibe la realidad que si no se ARRANCA desde el respeto…

 

Nuestra primera fortaleza debe ser el orden, entender las PRIORIDADES, si no logramos eso, haremos cosas buenas circunstanciales que correrán el riesgo de “diluirse” en un mar complejo... donde domine el que tenga mayor poder... IGUAL, toda obra buena siempre suma, porque nos permite ver las verdaderas necesidades... nos hace más humanos, más cercanos de la realidad, a la necesidad real como sociedad... a las prioridades.

 

Mi preocupación original fue que pongamos al aborto, o a la defensa DE LA VIDA de un inocente, en el mismo plano de otras variables a analizar en una plataforma política... eso significa que el relativismo se nos filtra sin que nos demos cuenta... nos pasa a todos, en distintos aspectos, en distintos niveles...

 

Este es un momento de REFLEXIÓN. 

Lo que ha sucedido, no es la votación de una ley más… como a veces se dice, que va en la misma línea del divorcio, del matrimonio igualitario, o los derechos LGTBI+... en mi humilde opinión, esto es MUY DISTINTO, es matar a los propios hijos... no se me ocurre una manifestación mayor de absoluto relativismo...

 

Si una sociedad aprueba eso... o vota para que la conduzca quienes aprueban eso... ¿que se puede esperar de esa sociedad?

Siempre se usó la expresión “es capaz de entregar a la propia madre”, para expresar lo PEOR de una persona...

Nunca, JAMÁS, nadie se animó a usar la expresión “es peor que una madre que mate a su propio hijo...” esa frase no existe, es imposible... no existe NADA comparable o peor a eso...

 

Quienes impulsaron esta ley (desde dentro y fuera del país), en este momento dicen que traen una vacuna para CUIDARNOS... ojalá funcione bien... ojalá al zorro le salga cuidar a las gallinas... en ese caso, cualquiera tendría derecho a preguntarse: “¿habrá gato encerrado?”

Una gran mayoría de los políticos arranca diciendo que “la política es sucia…”, que linda carta de presentación… entre ellos sienten que no pueden confiar en casi nadie.

Comunmente se usa la frase: “a fulano no le compraría un auto usado…”

¿Qué grado de confianza puede generar una persona que promueve que se “interrumpa” la vida de los propios hijos, según el cambiante deseo circunstancial…?

 

Argentina necesita un CARISMA de liderazgo muy especial… un liderazgo que exigirá mucho sacrificio… puesto en términos futboleros, un liderazgo para “salvarnos del descenso”, no para intentar el campeonato… 

¿Quién puede liderar sin generar confianza?

 

Honestamente, nunca pensé en debatir la conveniencia de una ley de aborto desde el plano religioso… jamás me lo planteé desde ese lugar…

Siempre me preocupó que la BUENA CONVIVENCIA SOCIAL, los consensos necesarios para encarar soluciones para el país, necesita una comunidad UNIDA, codo a codo, con todos CONFIANDO en el de al lado y empujando para el mismo lado…

Los traicioneros que están dispuestos a “entregar” a sus propios hijos no pueden participar en un proyecto de esas características… muchísimo menos liderar.

No existen los líderes perfectos, pero si los que respetan las prioridades que necesita una sociedad y GENERAN CONFIANZA.

martes, 8 de diciembre de 2020

20201208 “QUIENES NO PUEDEN PAGARLO...”


No todos quienes están a favor de la legalización del aborto trasmiten en forma transparente sus verdaderos motivos... es posible que los más honestos/as en ese grupo, sean quienes interpretan que el nuevo “intruso” es parte del cuerpo de la mujer/madre, y que ellas tendrían derecho a decidir sobre “esa nueva parte” de “su” cuerpo.

 

Promover un aborto, o apoyar a una mujer embarazada, involucra muchos enfoques, además del “deseo” de los padres sobre ese hijo, y el “derecho” de la mujer sobre su cuerpo... se afecta un plano ético/moral (que tipo de sociedad construimos), legal, sanitario, económico... cada uno se involucra en forma diferente, según sus principales intereses.

 

Un nuevo embarazo, y la OPINIÓN sobre si debe continuar o “interrumpirse” (para SIEMPRE), puede ser vivido en primera persona (la mujer/madre y el hijo), puede ser vivido como parte involucrado (en mayor o menor medida, varón/padre, algunas familias, ONGs y personas anónimas que dedican esfuerzo en ayudar a la mujer embarazada), puede ser vivido con cierto involucramiento (entorno que puede verse afectado, y aquellos a quienes solo les gusta analizar/discutir), por último están aquellos que siendo los más alejados desde el aspecto afectivo, al mismo tiempo son los más interesados desde el punto de vista político y económico... aspectos que pueden ir de la mano.

Estos últimos, al tener el menor involucramiento afectivo, son quienes tienen la mente “más fría” para elaborar estrategias según su propia conveniencia.

Este proceso ha sido estudiado con el mismo interés y rigurosidad con que cualquier empresario se esfuerza por promocionar un producto que él mismo elabora para la venta (marketing).

El principal impulsor para que el aborto fuera legalizado en EEUU, estableció algunos principios básicos que se repiten en todos los países (igual que cualquier estrategia de marketing):

- alterar las estadísticas, exagerar el número de abortos clandestinos y sus complicaciones (números abrumadores que lo posicionen como “prioridad” de salud pública).

- confundir e ignorar la evidencia científica (“hay dos bibliotecas”).

- debilitar la familia y todo concepto moral (anti-religioso).

- captar los medios masivos de comunicación.

Todo esto requiere instalar algunos “conceptos fuertes” que, confundiendo al indeciso, afecten su inocente valoración.

En el debate del 2018 los conceptos fuertes del abortismo fueron que la vida iniciaba en algún momento más adelante de la concepción, y que las leyes no eran concluyentes en la protección de la vida desde “ese” inicio...

Luego de haber perdido el debate del 2018, ahora, en 2020, eligieron otra estrategia: “es un problema de salud pública, donde quienes pueden pagar un ‘aborto de luxe’ estarán bien, y quienes no puedan pagar morirán...”.

 

Los políticos, y las organizaciones que de alguna forma negocian con el aborto, se ofrecen para resolver esa desigualdad social.

La propuesta es que el delito ancestral de “interrumpir para siempre” la vida de un bebé intra-útero se transforme en un derecho. Por lo tanto, que el estado, a través del sistema de salud pública, cubra ese derecho “gratuitamente” (pagado con los impuestos de todos). Ya han logrado que funcione así en otros países.

 

La falacia de la idea es TAN EVIDENTE, que resulta fácil demostrarlo... en Argentina más todavía.

 

Para empezar, salvo algún político muy honesto, NINGUNO de ellos pone un pie en una institución pública de salud, ni para atenderse un resfrío... En ese aspecto emblemático de “ayudaremos a QUIENES NO PUEDEN PAGARLO...”, esta ley no resuelve NADA... todo seguirá exactamente igual a como sucede hoy en día: “quien puede pagar, huye del sistema de salud pública”... 

La ÚNICA diferencia es que todos los centros clandestinos de aborto “de luxe” automáticamente se transformarán en legales... y como sucede en otros países, seguramente también sucederán otros negocios que acompañan a la práctica directa del aborto (ej, comercialización de los órganos del bebé abortado). 

Los clientes privados continuarán pagando el “up grade”, por sus propios medios, en las clínicas “de luxe”... en ese aspecto, es poco probable que quien pueda pagar un aborto “discreto” con sabanas de seda, elija ahorrarse el costo en un hospital público.  Considerando que al estado le cuesta afrontar los servicios de salud básicos (pacientes que esperan meses por cirugías o drogas oncológicas, etc, etc), esas mismas instituciones ofrecerán la terciarización de un “producto de menor costo -pero con igual calidad-” para la gente que solo accede al hospital... pero con precios negociados con el estado... estudios recientes en Argentina muestran que con lo que el estado paga por alumno que concurre a la escuela pública, sobraría para que esos mismos alumnos concurran a escuelas privadas…

Es sabido que médicos que se dedican al aborto en hospitales públicos de países donde el aborto es “legal y gratuito”, en muchas oportunidades se ven tentados de explicar a la “paciente” de bajos recursos, que por un tema de cupos o fechas o cualquier otro, no podría realizarse el aborto en ese hospital, PEEERO que él mismo se lo puede hacer hoy mismo en una institución que está a pocas cuadras, donde solo deberá pagar…

 

Hay otros países (ej: países escandinavos), donde la salud pública es de calidad equivalente a la privada, donde sus registros son de primera calidad mundial, y además con bajísimos niveles de corrupción. En esos países, con muchos años de aborto legal, el problema pasa por otro lado: mueren mucho más las mujeres que optan por el aborto, que aquellas que eligen dar a luz. 

 

Cada país que se vincula con el “derecho a abortar” tiene sus propios problemas… luego de la experiencia que ya tienen tantos países más desarrollados que nosotros (no siempre revelada en forma completa por los propios protagonistas), en Argentina, ALGUNOS políticos actuales, apoyados por instituciones extranjeras que se dedican al negocio del aborto, nos prometen que por acá todo será mejor… especialmente para QUIENES NO PUEDAN PAGARLO…

sábado, 5 de diciembre de 2020

20201205 TOCAR FONDO… vs… caminar hacia la FELICIDAD.

Siempre se puede estar peor... puede ser. 

Me gustaría analizar la expresión “tocar fondo”… no desde la potencialidad, de lo que podría ser inmanejable para cada uno; sino desde lo que cada uno está dispuesto a permitir que sea ese “fondo personal”... Reflexionar sobre ¿cuál es el límite, de cada uno… como para reaccionar, y comprometerME?

 

Lo opuesto a “tocar fondo” debería ser vivir encaminándonos hacia la FELICIDAD.

 

Podemos “dividir” a las personas entre quienes piensan PRIMERO en ellas mismas, como eje central (egocentrismo); que se diferencian de los que maduraron lo suficiente para comprender que ellos mismos se desarrollan, y logran su plenitud, en un plano de convivencia social (DAR, para ser feliz).

La expresión “maduran” es central, porque la tendencia natural, de los recién nacidos, es que todo gire alrededor de ellos, inicialmente para cuidarlos… La familia los ayuda a madurar en la convivencia con los demás, a entender que somos seres sociales que encontramos la felicidad en nuestra realización grupal. Es fundamental madurar ese switch, desde el egocentrismo inicial hacia la entrega por el bien grupal, que es lo que sostiene verdaderamente la realización personal. Sin un compromiso concreto de los padres (familia), y de la sociedad en conjunto, esa maduración puede ser lenta y/o parcial… lo cual lleva a los peores problemas de convivencia. El ser humano es una de las especies que más tarda en madurar en la continuidad de la vida extra-uterina… por ello, la FAMILIA ha sido denominada el SEGUNDO UTERO.

 

Pero la forma más habitual de “clasificar” a las personas, suele ser entre aquellos que disponen de recursos, y los que no… a estos últimos, en la actualidad se los denomina “vulnerables”.

¿Qué tipo de recursos? los más comentados suelen ser los económicos… 

Los recursos económicos constituyen uno de los aspectos a analizar, pero hay personas con pocos recursos económicos que son felices, y otros con muchos recursos económicos que eligen el suicidio… por lo tanto, parecería que el “recurso económico” no sería el eje central. Tal vez, una de las mayores vulnerabilidades esté en la incapacidad de distinguir un camino que conduzca a la felicidad, que no esté apegado a la necesidad de poseer abundancia de recursos económicos… Lo opuesto podría ser lograr una convivencia social que, apoyada en la austeridad, conduzca a la felicidad.

Dicho en otras palabras, tal vez, quien necesite “poseer mucho” para sentir que se acerca a una posible felicidad, sea mucho más vulnerable que quien tiene, o desarrolla, la capacidad de realizarse con poco.

 

Vamos enumerando algunos “VALORES”… tal vez un poco… ¿olvidados o poco jerarquizados?

Los valores de madurar nuestro egocentrismo inicial natural, en una familia que nos ayude a distinguir la felicidad que se encuentra en los buenos vínculos sociales, y que esos vínculos se fortalecen mucho más en el compromiso por el otro, que en la capacidad de poseer bienes materiales para uno mismo.

 

Entonces, ¿a qué podríamos llamar “tocar fondo”? 

¿Cuáles serían los valores que más nos afectan individualmente y/o como sociedad?

Puede pasar por innumerables planos: económico, organizativo, educativo/sanitario... de seguridad... de seguridad de preservación de los bienes, de seguridad de derechos o de la libertad, de seguridad de cuidar o potenciar la salud, de seguridad de poder vivir.

El ser humano siempre ha discutido sobre todos estos “planos”, cada uno dando prioridad al que siente que le impacta más de cerca. Hemos vivido discutiendo sobre aspectos económicos, de posesiones, de organización social… temas que condujeron a pérdida de libertades, a pérdida de vidas… desde eventos criminales aislados, hasta múltiples guerras.

Luego de dos guerras mundiales, en 1948, con representantes de todas las regiones del mundo, incluyendo diferentes antecedentes culturales y jurídicos, se llegó a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, un documento que marca un hito en la historia. Elaborada como un ideal común para todos los pueblos, inicia estableciendo: TODO individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona. Pero, ¿cómo alguien podría aspirar a cierta seguridad personal, o la libertad, si primero no está vivo? Es claro que el PRIMER derecho humano es VIVIR

 

¿Es posible que en la vorágine de nuestra vida diaria, esto no sea observado tan claramente? ¿Es posible que nuestra capacidad de análisis se “nuble” en forma tan flagrante?

 

En la historia de la humanidad, los hombres se han enfrentado y se han matado entre ellos… en algunas oportunidades de frente, en otras a traición… En la soledad de la derrota, y aún en la efervecencia de la “victoria”, la traición nunca fue bien vista, y de alguna manera siempre se intentó ocultarla (“la historia es escrita por los que ganan…”).

Aunque la VIDA sea el valor más esencial de todo ser humano, las sociedades “aceptaron” ciertas circunstancias para ponerla en riesgo (un punto donde muchos interpretamos que se deben seguir buscando mejores soluciones). Por ejemplo, cuando no se puede llegar a acuerdos y se declaran guerras, o cuando un individuo resulta “incontrolable” como asesino…

Pero, sin embargo, toda la humanidad, en toda su historia, incluyendo todas las culturas, razas, religiones, etc, etc, acepta que no se debe matar por la espalda, a traición, a un inocente, a un indefenso…

A pesar de este claro “inconsciente colectivo”, estas cosas “malas”, siempre sucedieron… 

Las sociedades más evolucionadas, en base al progresismo de sus integrantes, fueron estableciendo REGLAS de convivencia. Robar, matar, etc, fueron considerados DELITOS, y para ello se establecieron PENAS… y esas penas tuvieron atenuantes y agravantes. Los sectores más conservadores de las sociedades, observaron que esos logros fueron buenos, y no quieren perderlos. Ojalá existiera un buen debate entre progresistas y conservadores para mejorar esas “reglas de convivencia”.

 

¿CUÁL es el ser HUMANO más inocente e indefenso de toda la sociedad, y al mismo tiempo MAS ESENCIAL? Sin dudas, el HIJO en su etapa evolutiva más inicial.

Al mismo tiempo es la etapa de mejor estado de salud de todo ser vivo, y de mayor potencialidad.

Por eso, se ha demostrado científicamente, que la MEJOR inversión de una sociedad es potenciar el desarrollo de esos nuevos seres humanos en sus primeros 1000 días de existencia (desde la concepción hasta los dos años), y apoyar a la FAMILIA para continuar su desarrollo… no hay ninguna duda.

 

¿Qué estamos debatiendo como sociedad?

Aquello que el progresismo logró que se identificara como un delito (luego de muchas luchas): “que el más fuerte se aproveche del más debil”, en cualquiera de sus expresiones… se está evaluando dar marcha atrás, y que ya no sea un delito. 

Volvemos a la época de las cavernas, donde el que tenía más fuerza prevalecía sobre los más débiles, sin ningún parámetro de justicia…

Pero en toda la historia de la humanidad, aún en la época de las cavernas, la injusticia no fue valorada… SIN EMBARGO, hoy estamos debatiendo algo peor aún, que esa injusticia sea un derecho… ¿basado en qué parámetros? Solo en el deseo o la conveniencia circunstancial del más fuerte.

 

Los seres humanos tenemos muchísmimas cosas para seguir mejorando y corrigiendo… la mujer, algunas comunidades, etc, no han sido históricamente valorados como deberían haberlo sido, y con mucho esfuerzo lo fueron haciendo notar. La dignidad de todo ser humano debe ser la misma, por el solo hecho de estar vivo, independientemente del sexo, la raza, los recursos económicos y un enorme etcétera.

 

Hoy debatimos si está vivo el ser vivo de mejor estado de salud y potencialidad (flagrante negación de la realidad). Si quienes son dotados por la naturaleza para cuidarlo, pueden matarlo (no existe una traición de calibre similar). Si debe existir o no, una justificación para matar a esos hijos no nacidos, o solo debe privar el deseo de hacerlo (imposible imaginar un acto de mayor injusticia). Si la sociedad debe destinar sus recursos comunitarios para financiar tales hechos (contradicción absoluta para la conservación de la especie). Si ADEMÁS, unos pocos, se deben llevar ganancias millonarias para sus arcas personales, impulsando negocios alrededor de estos hechos (sin palabras para denominar lo que esto significa).

Quienes impulsan esos negocios han sembrado de dudas todos los terrenos… “a sociedad dividida / ganancia de pescadores (poderosos)”. Mucha gente de bien, se ha visto turbada y confundida, debemos ser comprensivos y esforzarnos en mejorar el diálogo y nuestra capacidad de consensos.

Se estiman 60M de abortos instrumentales cada año, más los químicos que se considera que los triplícan…

¿Es necesario agregar algo más? Este es el punto al que hemos llegado, ¡aquí estamos parados hoy!

¿Existe alguna situación comparable en toda la historia de la humanidad? ¿Se puede caer más bajo?

¿Cuál es el FONDO que cada uno está dispuesto a llegar, cómo para reaccionar?

 

Discutimos, en la diaria, sobre innumerables problemas… ¿Habrá llegado el momento de JERARQUIZAR nuestras PRIORIDADES, pensando en el mundo en el que queremos VIVIR, y en el LEGADO que querríamos dejar? ¿Dónde entendemos que inicia el camino hacia nuestra felicidad plena?

 

 

sábado, 21 de noviembre de 2020

20201121 LA VIDA… nuestra vida, la vida de los demás…

¿Existe un bien que pueda equipararse, en importancia, al derecho a vivir? ¿Se trata de una construcción cultural o temporal, o por el contrario, es inherente a la esencia del ser humano de todos los tiempos?

 

¿Tiene el mismo valor MI vida, comparada con la vida de los demás?

¿Entre “los demás”, hay algún grupo que pueda considerarse con mayores “credenciales”, o más privilegios que otros, para ejercer ese derecho a vivir?

 

¿Cómo se respetó el derecho a la vida en el transcurso de la historia de la humanidad? ¿Cambia el valor esencial de la vida, o lo que cambia es nuestra forma de respetarlo y hacerlo respetar?

Una impresión general es que, desde el “hombre de las cavernas”, predominó la voluntad del más fuerte… de esa forma, quienes ejercieron “el poder” dictaminaron sobre la vida de los demás. Mientras tanto fueron surgiendo voces aisladas, cada vez más numerosas y reflexivas, sobre la igualdad, en dignidad, de todos los seres vivos, independientemente de su fuerza y poder… hasta que, uno de los mayores signos de PROGRESO, fue el respeto social, establecido en leyes, para que los más débiles e indefensos se sientan protegidos y en equivalencia de oportunidades para desarrollar sus potencialidades. Las religiones que tuvieron mayor cantidad de seguidores, siempre rescataron el valor y el respeto por la vida humana.

 

Pero recién en 1948 se reunieron representantes de todas las regiones del planeta, y en forma conjunta y consensuada se enunció laDECLARACIÓN UNIVERSAL DE DERECHOS HUMANOS, que empieza mencionando la igualdad, en dignidad y derechos, de TODOS los miembros de la familia humana… Su PRIMER manifestación es el derecho de todo ser humano A LA VIDA, a la seguridad y a la libertad.

Ante tamaña declaración, quienes tienen poder, o a quienes se les delega un determinado poder, en lugar de la facultad de decidir sobre el derecho a vivir de un individuo, deben trabajar para asegurarle y potenciar ese derecho… caso contrario estarán “DES-progresando” hacia sociedades desordenadas, donde prevalecía el interés individual, por sobre el interés común. Y el mayor interés común de cualquier sociedad debe ser el de auto-preservarse en la vida, en la existencia; por ello, “los más fuertes” deben cuidar la célula familiar, que es donde se producen, y maduran adecuadamente, los nuevos miembros de las sociedades.

 

Desde los inicios, el hombre se debatió entre el predominio del interés individual por sobre el interés común, tanto en planos teóricos como muy prácticos… incluso disponiendo, los más poderosos, de la vida de muchos otros, para sus propios beneficios individuales. 

Hace poco más de 2000 años, nació un Hombre que dividió la historia de la humanidad en un antes y un después. “El poder” de ese Hombre no estuvo en imponer, sino en respetar con libertad absoluta, y solo ENSEÑAR el concepto de “ENTREGA por los demás”… al punto tal, que Ese Hombre entregó Su propia vida por los demás. Impactó al mundo, resaltando lo bueno, lo bello y lo verdadero, desde la humildad y la sencillez… completamente por fuera de los cánones habituales, y más todavía actuales, de “conquista”. Aquellos que se sintieron incomodados, no pudieron refutarlo con argumentos… y cuando se vieron “más expuestos” en sus intereses, eligieron “interrumpir” su vida, crucificándolo en medio de ladrones… todo eso sucedió en un proceso injusto y muy violento, con la indefensión de quien es pacífico y es olvidado por sus amigos o quienes lo deben proteger… con la cobardía de quienes se lavaron las manos, o de aquellos que lo golpearon sin dar la cara, creyendo que los protegía el anonimato… y también con mucha indiferencia de quienes muchas veces habían expresado admirarlo… 

A pesar de toda la sencillez, bondad e indefensión de Ese Hombre, fue el momento de la historia, donde más se puso de manifiesto la diferencia entre una visión egocéntrica de la vida poniendo foco en el acumular o el aprovecharse de los demás; frente a la búsqueda de la felicidad conjunta, ayudando y participando con otros, de la alegría de llegar a esa felicidad juntos, en comunidad, poniendo más foco en el dar, que en el esperar recibir…

 

Desde hace mucho se sabe que el hombre es un ser eminentemente social, que tiende a su realización en un plano comunitario, mucho mas que en el individual. Actualmente, la ciencia moderna ha corroborado esto, demostrando que la felicidad, y la buena salud, están más asociadas a los buenos vínculos familiares y de amistades cercanas, que a valores clínicos o de laboratorio (ej: nivel de presión arterial o de colesterol en sangre).

A pesar de esos conocimientos, y sus científicas demostraciones, persiste la tendencia infantil al egocentrismo, demorando, extremadamente en muchos casos, la maduración hacia conductas más sociales, donde predomine el bien común… conductas más humanas…

 

Pero, respecto de LA VIDA, el ser humano no solo se debate entre la manipulación de la vida de los demás, aprovechándose de ella, eliminándola (o “interrumpiéndola”); o, por el contrario, protegiéndola o potenciándola… sino que también se le ha concedido el don de crear nueva vida humana. 

¿Hasta que punto se valora ese don?

Parecería que, en un comportamiento muchas veces similar a estados infantiles, la posibilidad de generar nueva vida es “más valorada” por aquellos que se encuentran imposibilitados de generarla… También parecería que, algunos de quienes pueden generar nueva vida, habrían asumido la postura de derrocharla, malgastando o eliminando aquellas nuevas vidas que generan, o que les son confiadas (según el enfoque espiritual de cada uno). Algunos se sienten todopoderosos, que pueden hacer lo que quieren, según el caprichoso deseo del momento y sin valorar el impacto de sus acciones en los demás… o incluso en ellos mismos… Mientras que otros, se sienten responsables y comprometidos con lo que hacen, generan o dejan de hacer… ¡que diferencia! Responsabilidad vs Irresponsabilidad.

Otra vez, desde la ciencia se demuestra que la obtención de logros conjuntos, con objetivos respetados en valores universales, generan la liberación de neurotransmisores que conducen a las neuronas a un estado entendido como de felicidad, mientras que durante los placeres del momento se segregan otro tipo de neurotransmisores que se asocian más a producir dependencia que felicidad… lo importante de aprender la gran diferencia entre placer y felicidad.

 

El ser humano sigue transitando los mismos dilemas. 

Aquellos con mayor poder o talentos, se debaten entre aprovechar esas ventajas para si mismos versus hacerlas florecer ayudando a mejorar la sociedad en la que les tocó crecer. Algunas mujeres, que se ven oprimidas por la fuerza bruta de algunos varones, trabajan para salir de esa situación con la dignidad de quien busca la misma mejora para otros en circunstancias parecidas; mientras que otras, cuando mejoran su situación personal se olvidan de aquellas que padecían sus mismos problemas; o peor aún, algunas de ellas, mientras reclaman igualdad de trato y oportunidades, tratan peor a quienes son más indefensos que ellas, “interrumpiéndoles la vida”, incluso hasta negándoles la esencia misma de seres humanos vivos que ellas mismas les transfirieron al momento de concebirlos y tratándolos como “objetos desechables”, a pesar de ser sangre de su sangre y que la naturaleza las haya dotado para cuidarlos y defenderlos… muchísimas veces presionadas por el entorno que debería cuidarlas a ellas. Es tanta la interacción entre madre e hijo, con sistemas hormonales e inmunitarios que se protegen y potencian mutuamente, que es imposible pensar en una traición equivalente a la de una madre que abandona a su propio hijo, al punto de quitarle la vida, y al punto de hacerlo de la forma más violenta que se pueda imaginar (“contratando” a alguien que le produzca un desangramiento para que muera asfixiado en la expulsión, inyectándole algún tóxico en el cerebro o en el corazón, quemándole la piel hasta que muera, o directamente desmembrándolo por arrancamiento…). También están aquellos varones y mujeres “cobardemente indiferentes” (cada uno sabremos en qué grado), que mientras todo aquello sucede, encontramos los justificativos para desentendernos… 

La manipulación de la vida de los más indefensos sigue sucediendo en sus infinitas variantes. El gran cambio que se presenta actualmente, es que esa manipulación egocéntrica pretende ser presentada como un derecho… un “derecho” que, a “algunos”, les permite hacer grandísimos negociados… con la complicidad o indiferencia de muchos de los que deberíamos evitarlos… En este último párrafo está la esencia de lo que se está debatiendo cuando se busca impulsar una ley (anti-beneficiosa) de interrupción (no se interrumpe, se mata) voluntaria (mayormente presionada por el entorno o por un disvalor de la vida) del embarazo (de la gestación y del embarazo). 

 

Los dilemas siguen siendo los mismos…

Solo me fijo en lo que a MI me conviene, y que el resto explote por los aires; o me dejo enseñar, y enseño con el ejemplo, que la felicidad se logra en la convivencia, y que la más sana convivencia se logra en la dinámica del respeto y del darnos por los demás… 

#Bastadevalorarlavidadelosdemassegunelcaprichodemisdeseos

martes, 10 de noviembre de 2020

20201110 Día de la TRADICIÓN – Conservadurismo vs progresismo.

¿Cómo entender el festejo del día de la tradición, cuando muchas sociedades se pelean entre los opuestos de conservadores y progresistas?

 

PROGRESAR es una de las principales metas de cualquier individuo o sociedad, por lo tanto, el término debe vincularse con algo bueno. Su opuesto sería el estancamiento. Pero, el solo hecho de ponernos en movimiento, si bien quiebra el estancamiento, no significa necesariamente progresar… a veces, el movimiento puede significar retroceder.

 

Las tradiciones se vinculan a lo clásico, que sería aquello donde la sociedad desarrolló un consenso positivo. Para comprender mejor el concepto, la expresión artística podría ser un buen territorio donde entender la idea de lo clásico, ya que la diversidad de gustos artísticos es potencialmente infinita, y la elección de una determinada expresión artística casi siempre es voluntaria y pocas veces responde a presiones externas… cuando un libro, una escultura, una composición musical, una pintura adquieren el status de clásico, globalmente se está aceptando, que un amplio universo de personas consideran a esa creación artística como una obra maestra. Puede que a alguien no le guste el libro “Don Quijote de la Mancha” de Cervantes, o la escultura conocida como “el David” de Miguel Ángel, o la pintura “la última cena” de Leonardo, o la “novena sinfonía” de Beethoven, pero aún aquellos, a quienes no les guste, reconocerán en esas creaciones algún mérito para ser consideradas clásicos.

Algo similar podría aplicarse a determinadas conductas sociales. En los inicios, cuando el “hombre de las cavernas”, predominaba la imposición en base a la fuerza bruta. La evolución de las sociedades en lo que respecta a los vínculos de sus individuos fue generando cambios en sus conductas… algunas de las cuales podría considerarse que se convirtieron en un clásico del progreso de las sociedades. Por ejemplo, en lugar de resolver un pleito por el empleo de la fuerza, hoy todo el mundo “educado” (tradición que se fue transmitiendo) acepta que la mejor forma de dirimirlo es fundamentar las distintas posiciones, y si no se pudiera llegar a un acuerdo, recurrir a un tercero capacitado en pleitos, y que además sea imparcial. Esta forma de resolver los problemas es hoy un clásico aceptado universalmente. Así se fueron constituyendo las costumbres clásicas o tradicionales. Ser amable y cortés facilita el diálogo y el entendimiento entre las personas… un clásico. 

El idioma es una herramienta fundamental para la sana convivencia. Si uso una palabra para expresar una idea, y mi interlocutor entiende lo opuesto a lo que quiero expresar, estaremos en problemas. Por eso es clásico o tradicional que existan personas que estudien la mejor utilización del lenguaje, con las adaptaciones propias de los usos y costumbres. De esa forma, personas educadas y con buena voluntad, deberían entenderse.

 

Todos estos avances surgen de mentes que buscaban el progreso (progresistas) en determinadas áreas. Al mismo tiempo, quienes mejor reconocen esos progresos, y cómo los mismos se transformaron en verdaderas mejoras sociales, son quienes defienden la importancia, el peso social, de esos logros (los conservadores).

Por lo tanto, vistos así, progresistas y conservadores podrían ser las dos caras de una misma moneda. Ambos necesarios, aunque puedan parecer opuestos. El progresista tiende al cambio, algunos serán positivos, otros negativos. El conservador reconoce el valor de los cambios positivos y descarta los negativos. Sin progresistas no habrían cambios, sin conservadores no habría quien evalúe y defienda los cambios positivos, por lo tanto, para que haya PROGRESO, ambos son necesarios.

 

Un progreso interesante y necesario podría ser que conservadores y progresistas dejen de pelearse, para aprender a trabajar en forma coordinada y complementaria… y que algún día, eso también forme parte de la buena TRADICIÓN... ¿será posible, o se trata de algo utópico?

sábado, 31 de octubre de 2020

20201031 Fratelli Tutti - un análisis sobre la encíclica del Papa Francisco

Un amigo me mandó varios análisis sobre la Encíclica Fratelli Tutti, que se sumaron a otros, tanto de Argentina como del exterior. Se fueron incluyendo análisis MUY diversos, desde distintos ángulos... comentarios a favor y en contra, incluso abiertamente en contra, considerando al Papa como un ser malvado. Escuché y leí todo con mucha atención, TODOS me hicieron reflexionar.

La mayoría de nosotros no conoce en profundidad a Jorge Bergoglio, ni hemos conocido en forma cercana a ningún Papa, pero crecimos con un gran respeto por la imagen del Papa... casi todos tenemos un aprecio TAN especial por Juan Pablo II, hoy santo bajo este pontificado...

Y, de repente... el Santo Padre es argentino!!! ¿cambia algo? Cada uno sabrá si en alguna medida eso le influyó positiva o negativamente... pienso que no debería hacerlo en temas de fe.

En algún lugar, la mayoría de la gente de bien se debe alegrar por cosas positivas de un líder, lo mismo que les debe doler que exista una imagen negativa o se digan cosas en contra de un Papa, a quien nuestro Jesús dejó como sucesor, sea de la nacionalidad que sea.

Quien llega al papado es un hombre común, como lo fueron los apóstoles... a partir de 12 personas muy sencillas, DIOS armó la Iglesia Universal (yo interpreto que es algo imposible sin un Dios por detrás)... hubieron apóstoles y discípulos santos y otros que no, papas santos y otros que no... el mismísimo San Pedro negó a Jesús en su cara, cuando Él mismo se lo había advertido minutos antes... a pesar de ello San Pedro es nuestro patriarca, no por su propia perfección, sino por su búsqueda de Dios...

Sobre Fratelli Tutti, alguien cercano al Papa Francisco expresa que la Encíclica se centra en la dignidad del hombre, poniendo énfasis en la arquitectura y la artesanía del ENCUENTRO entre los hombres. Quienes piensan distinto, dicen que no toca temas de fe, que confunde nociones sobre economía, que está inspirado por la masonería o directamente por el "más malvado", etc, etc. (acusaciones durísimas).

No escribiré ni a favor, ni en contra de nuestro Papa... solo trataré de hace un mini resumen de lo que he leído y escuchado estos días, a favor y en contra... lo que me queda a mí.

Si tengo que resumir, diría que el Papa nos propone pensar si existe una diferencia entre “prójimo” y “socio”... 

Y si alcanzáramos a entender lo que significa esa diferencia... luego de reflexionar en profundidad sobre la misma, nos estaría proponiendo que nos planteemos: ¿qué lugar estaría ocupando en la vida de cada uno de nosotros ese “juego socio/prójimo” con que “me” vinculo con cada persona, o en cada situación de nuestras vidas... todos los días... tanto en los vínculos más sencillos, como en las grandes decisiones que le toca a cada uno?

Pareciera que la encíclica se va “apoyando” en la enseñanza de la parábola del buen samaritano, donde quien ayuda, no se fija en los antecedentes propios de toda situación, sino que va directo al punto: “alguien necesita ayuda, por lo tanto me ofrezco para AYUDAR” (lo cual surge de cuando a Jesús le preguntan “¿quien es el prójimo?” Él RESPONDE diciendo que "eso" es lo que hizo aquel samaritano de la parábola... cada uno tiene que sacar sus conclusiones)...

El Santo Padre va más allá de la dinámica “¿me corresponde a mí ayudar?” “¿es parte del trato?” “¿quien tuvo la culpa?” “¡te lo advertí!” etc etc... que probablemente serían los PRIMEROS planteos de una relación entre “socios”... (que tal vez sea lo que se habrán planteado en su interior el levita o el maestro de la ley, que a diferencia del samaritano, no se detuvieron a ayudar). Todos podemos estar circunstancialmente en cualquiera de las tres posiciones...

¿Se podría decir que el Papa nos propone reflexionar sobre la “dinámica” de relaciones que nos plantea primordialmente el mundo actual? ¿Más "socio" o más "prójimo"?

Luego se pueden proponer miles de situaciones, y posibles soluciones... muchas de las cuales pueden gustar o no, o incluso ser mejorables desde un aspecto profesional/técnico... entonces “esos profesionales” podrán tener una actitud de crítica, hasta con cierto ensañamiento, o se podrá tener una visión constructiva de mejorar... de mejorar desde ese encuentro que se abre, donde comprendo la dificultad del otro (en ocasiones con menos formación en áreas determinadas), donde cada “profesional” puede aportar lo suyo... 

Podría surgir OTRA pregunta, que también sería clave: ¿entiendo la diferencia entre “aportar” vs “imponer”? ¿cómo es mi dinámica personal respecto a ello? Cuando se plantea cualquier propuesta o reflexión, ¿ingreso al debate observando la oportunidad de construir desde el encuentro, o tengo la tendencia a “ver primero” la oportunidad del disenso y la crítica?

A pesar de que pareciera que la INTENCIÓN del Papa Francisco haya sido escribir para un público “universal”, se debe reconocer que podría resultar difícil de comprender, incluso hasta “chocante”, para quien desconoce el "revolucionario" espíritu de Jesús, y de la parábola del buen samaritano... o para quien, conociéndola, hasta incluso habiéndola analizado como experto en el plano teórico, le cueste “bajarla” a la cotidianeidad de las situaciones que se nos presentan constantemente... desde la caridad de quien entiende mejor las cosas, o tiene una posición más ventajosa.

El PRISMA de distinguir entre ser “socio”... o ser “prójimo”... Todo ello sin que ninguna de ambas situaciones minimice la capacidad productiva... solo que PROFUNDICE sobre la calidad del encuentro, la visión que le damos a los insumos que aportamos, y que cada uno espera darle a los beneficios obtenidos...

Parecería que el Papa busca RESALTAR la potenciación de los vínculos... que puede darse desde la “comodidad” de lo ya conocido, o desde la “crisis” de lo nuevo, que puede enriquecer... o no... ¿de qué o quién depende? Posiblemente de nuestra actitud.

Aunque se debe otorgar el lugar que le corresponde al “RESPETO por la propiedad privada”, se debe analizar con profesionalismo las distintas técnicas económicas productivas; el MENSAJE de Jesús, nos OBLIGA como cristianos (seguidores de Cristo) a plantearnos la diferencia ESENCIAL entre “socio” y “prójimo”.

Mi visión sería que nuestro Papa nos está ofreciendo SU EXPERIENCIA DE VIDA. Con mucha transparencia, está abriendo su corazón, exponiéndose a críticas, y nos dice: “esto es lo que yo observo desde mi experiencia de vida”. Yo respeto esa experiencia, porque entiendo que ha sido INTENSA, y la creo bien intencionada, por más que pueda disentir en algún aspecto (¿es posible pensar en estar de acuerdo en todo con alguien?). También respeto mucho, a muchos de quienes he escuchado atentamente sus críticas a la encíclica... creo que pueden ENRIQUECER la visión planteada... ¿de que dependerá? Creo que de la ACTITUD de “aportar”, en lugar de "sentirse atacados” y reaccionar buscando “defenderse” con una actitud de “imponer” su postura.

Para terminar, humildemente agregaré otro pasaje del Evangelio de Jesús, además de la parábola del buen samaritano, con el espíritu de tratar de comprender esta REFLEXIÓN del Papa Francisco frente a la problemática del mundo actual.

La situación de mucha gente de buena voluntad en este mundo en el que nos toca vivir, entre los cuales me incluyo, y que tenemos la POSIBILIDAD de leer esta encíclica, es parecida a la de un joven “rico” que se acercó a Jesús, y con muy “buena onda” le dijo:

- jr: ¿qué tengo que hacer para ser mejor?

- Jesús: cumple los mandamientos.

- jr: ya los vengo cumpliendo...

ENTONCES, el Evangelista dice que Jesús “lo miró con ternura” y le dijo: no te apegues a los bienes materiales, si quieres mejorar como persona, compártelos...

WOW... silencio... ¿cómo termina la historia?

El Evangelista dice que el joven “rico” se retiró triste... porque tenía muchos bienes...

Algún día entendí que TODAS las personas que se encontraron con Jesús, salieron exultantes de alegría... SIEMPRE... incluso Jesús les pedía prudencia en contar, pero ellos no podían contenerse... SALVO el joven “rico”, apegado fuertemente a esos bienes que seguro fueron obtenidos legítimamente (era una buena persona que cumplía los mandamientos). Es el UNICO que se retiró triste luego del encuentro con Jesús... 

Reflexiono acerca de MIS encuentros con Jesús... ¿me entrego o “negocio”? ¿Hasta que punto? ¿Soy “prójimo” o soy “socio”? 

Hace pocos días, un sacerdote decía que existen muchas riquezas: la alegría, la fortaleza espiritual, los talentos, etc... y también la "posesión de bienes materiales". Pero que esta última, desde la óptica cristiana, podría considerarse algo así como una de las riquezas "pobre"... porque puede llegar a confundirnos... Pero la producción, y la posesión de bienes materiales, no deja de ser una riqueza para el cristiano, dependiendo el lugar y el uso que le demos. 

La encíclica nos interpela a todos por igual... incluida la persona que circunstancialmente Dios elige como Sumo Pontífice, en todas las épocas... Muchas críticas giraron en torno a las “posesiones” del Vaticano, incluso a tener un Banco propio... El tema no son los bienes... ojalá tengamos la capacidad de producir cada vez más, para que cada vez haya MÁS bienes materiales aprovechables... el tema es nuestra actitud frente a ellos... yo interpreto que a ESO se refiere la Encíclica Fratelli Tutti.

Por último, agregaré algo muy personal, que sí tiene que ver con una apreciación sobre el Papa Francisco. A cada Papa le observé un carisma que lo distingue, repito, es una visión personal que no tiene porqué ser compartida. El carisma que me atrae especialmente del Papa Francisco es el de su AUSTERIDAD.

Humildemente considero que era muy necesario un planteo como el que hace nuestro Santo Padre en Fratelli Tutti, necesitamos reflexionar sobre estos temas... algunos tendrán puntos para aportar, otros para corregir, pero no podemos dejar de plantearnos estos puntos sobre nuestra convivencia.

Una reflexión final sobre esas voces que buscan "advertirnos" sobre las intenciones de alguien, en este caso puntual, sobre las buenas o malas intenciones del Papa. Nuestro Dios se revela en las Santas Escrituras, allí nos cuenta la historia del rey Salomón, a quien le concedió el don de la SABIDURÍA... Cierta vez, dos mujeres se disputaban un niño, ¿cómo saber cuál decía la verdad sobre ser su madre? El rey ordenó que partieran al niño, y le dieran una mitad a cada una. Una de las mujeres reaccionó al instante: "NO!! prefiero que se lo den a ella!". Así el rey supo quién era la verdadera madre.

Ante la duda sobre determinadas intenciones, cuando aparezcan contrapuestas... Dios nos enseña, a través del rey Salomón, a analizar la situación bajo la lupa del AMOR. Quien impresione más conciliador, quien se exprese mejor sobre su adversario, quien tenga más paciencia y busque entender al que piensa distinto, es posible que sea quien honestamente esté más en busca de "aportar" para encontrar la verdad, más que buscar "imponer" su propia verdad.

domingo, 27 de septiembre de 2020

20200927 REFLEXIONES SOBRE EL aborto, EN SEPTIEMBRE 2020... CORRIÓ AGUA BAJO EL PUENTE.

Pasaron dos años y medio desde que el presidente de Argentina 🇦🇷 impulsó el debate público por el aborto. 

A pesar de la sorpresa inicial, debemos reconocer que no es un tema nuevo, acompaña al ser humano desde sus inicios... al principio sólo serían “abortos espontáneos”, hasta que alguien habrá empezado a "interrumpir" esas vidas... ¿legalmente? no... en esas épocas no creo que hubieran debates sobre estar dentro o fuera de la ley... seguro habrán sido solo abortos “voluntarios”, no “legales” (hoy se los puede llamar IVE o ILE, indistintamente)... ¿cómo imaginar esos “pioneros abortos provocados”, llevados a cabo por alguien que tuvo la gracia de nacer, y que un día decidió impedírselo a otros?... ¿cuál habrá sido la motivación inicial?

El aborto existía... y siempre fue clandestino, como todos los delitos... porque la espontánea reacción de quienes abortaban, y de aquellos que no lo hacían, fue siempre ver al aborto como algo vergonzoso. La honestidad intelectual no podía valorar el egocentrismo extremo, o la angustiante desesperación de matar al hijo propio... Entre esos extremos "cabalga" esta extremadamente difícil situación: el momento de  máxima angustia donde la mujer necesita mucha ayuda (debe ser comprendida, acompañada y/o consolada según el momento y las circunstancias), y en la otra punta, la despreocupación de la irresponsabilidad, fomentada por algunos "pícaros" con intereses especiales... Existen muchos grises en el medio.

El presidente argentino no fue novedoso al tocar el tema del aborto... la gran novedad del debate fue pretender transformarlo en una virtud, en un “elemento de primera necesidad”, en un derecho...

Al inicio de ese debate tan promovido, todavía parecía existir “el derecho a NO abortar”... al menos ese era el discurso de quienes estaban a favor de una ley para “abortar a demanda” (“quien no quiera abortar que no aborte, pero permítanle hacerlo a quienes si quieren” -sic-)... Solo dos años después de que los representantes de la Nación Argentina votaron que el aborto no fuera ley... la posibilidad, o ¿el derecho?, a DEFENDER LA VIDA, se ve más borroso... el gran lobby abortista logró que se declarara inocente a una médica que indicó abortivos a una menor de edad, la desatendió, y luego la paciente murió por complicaciones directas del aborto... Mientras que, casi al mismo tiempo, logró que se condene como culpable a un médico que recibió en una guardia a una mujer cursando complicaciones infecciosas de un aborto en curso, cuyo único “delito” fue SALVAR LA VIDA de la madre y de su hijo, que luego fue dado en adopción y hoy crece con una familia adoptiva, feliz de poder cuidarlo... hay muchas presiones, sobretodo sobre los médicos jóvenes... se busca eliminar la objeción de conciencia, los idearios institucionales, el apoyo de la familia, etc... forzar, forzar, forzar.

La Constitución Nacional y muchas Constituciones Provinciales defienden la vida, como también lo hace la Declaración Universal de Derechos Humanos. Lo mismo dice nuestro recientemente renovado Código Civil y Comercial, mientras que el Código Penal coloca al aborto en el capítulo de los delitos contra la vida, y su modelo de renovación propone penas para quienes dañen al feto durante un embarazo. El Congreso de la Nación, a través de los representantes elegidos democráticamente por el pueblo, votó en 2018, que el aborto no fuera ley en Argentina, consagrando una vez más el derecho a la vida... 

SIN EMBARGO, no existe grieta entre los partidos políticos mayoritarios para promover el uso de los recursos públicos para realizar abortos basados en “protocolos administrativos”. Gobierno y oposición se unen para aplaudir a la que ellos consideran el área de mayor éxito en la gestión pública: la promoción de abortos. Ningún oficialismo puede presentar un área de “mayor éxito” en sus gestiones actuales (bajo sus parámetros) que en el área de “salud sexual y reproductiva”... y ninguna oposición deja de aplaudir “dichos éxitos”, donde básicamente se daña la salud sexual, y se evita la reproducción... claro... se cambió el concepto... la vida existe, y/o es valorada, según la “alternante voluntad” de los padres, y la presión del entorno.

La Corte Suprema de Justicia de la Nación "aclaró" los puntos en duda: 

- cuando un embarazo es buscado, el mismo se inicia al momento de la concepción, y desde ese instante necesita cuidados. Como también muy claramente lo explican los programas denominados “1000 días” para proteger al binomio madre/hijo, tan necesario en esta Argentina 🇦🇷 empobrecida, y que tantos “políticos abortistas” apoyan.

- cuando el embarazo no fue buscado (en cualquier circunstancia, incluido el “cambio de opinión” de antes lo busqué, pero ya no), entonces el nuevo ser automáticamente pasa a la condición de “conjunto de células - aún no llega a ser humano”, en ese mismo instante pasan a ser “PARTE del cuerpo de la madre”, y por lo tanto, ella puede disponer libremente (o presionada por su entorno) de ese “agregado” a su propio cuerpo... pero que hasta “hace muy poco” no era parte de su cuerpo, porque todavía no estaba o no existía... un poco raro como argumento, ¿no?

- ¿hace cuanto tiempo que esa “parte” es “parte” de “tu” cuerpo?

- no lo sé bien, creo que desde que tuve relaciones sexuales, un espermatozoide se unió a mi óvulo, y empezó a crecer... creo que hasta ya late por sus propios medios... ‘me dijeron que es un cúmulo de células’.

Para deshacerse de ese “coágulo o cúmulo de células”, el “menú oficial” hoy ofrece distintas opciones:

- ser subsidiados por todos los ciudadanos a través de sus impuestos, y que el aborto se realice en una sala u hospital público... con enormes deficiencias en insumos y controles. Las mismas deficiencias que padecen las madres que SI quieren cuidar a sus hijos, que necesitan controles de embarazo y adecuada asistencia en parto y puerperio. La única diferencia es que quienes quieren abortar, tienen PRIORIDAD absoluta.

- la otra “opción oficial”, pero que “nadie se da cuenta” (algo parecido al mercado paralelo de venta de dólares, que no es legal, pero ninguna autoridad se da cuenta que existe), sería concurrir a lugares de distinto nivel de equipamiento, algunos hasta “de luxe”... según la capacidad económica de los interesados, para realizar un aborto en forma “clandestina”... la única diferencia con un sitio oficial sería que (por ser clandestinos), no deben pasar por los controles de calidad que exige el estado nacional a sus centros de salud... incluso se ha comentado que podrían estar asociados a otros “negocios turbios”... difícil asegurarlo porque no disponemos de datos “oficiales”...

La ingeniosa propuesta de quienes favorecen el aborto, y una mayoría de nuestros políticos y medios de comunicación, es oficializar a todos esos centros clandestinos con un proyecto de ley que automáticamente los transforme en "legales", para que podamos “controlarlos” y entonces contar con “datos oficiales”... hay que reconocer que nuestros políticos pueden ser ingeniosos... posiblemente estén pensando algo similar para otros delitos.

En 2018 sucedió el mayor debate de la historia del Congreso de la Nación. Expertos en ciencias y en leyes aclararon todos los puntos. Expertos en “confundir”, se encargaron de instalar la teoría de que una mitad de la biblioteca dice una cosa, y la otra mitad dice otra... Relativizar los conceptos científicos objetivos, las responsabilidades sociales, y solo fortalecer el "deseo" circunstancial de una mujer angustiada o del entorno que la presiona. A pesar de la enorme presión mediática y de los líderes de los principales partidos políticos, los legisladores votaron a favor de la vida, por el sentido común y la conciencia que le reclamó la población, con espontáneas marchas pacíficas de grupos de familias.


La población general está sorprendida.

Por un lado recuerda cómo fueron siempre las cosas. Las mujeres adultas, más que nadie, saben bien qué es eso de quedarse embarazadas, y CUANDO comienza la vida de sus hijos...

A los más jóvenes, que todavía tienen poco recorrido de vida, se les ha vendido una propaganda que “cierra por todos lados”: ‘no es necesario que seas responsable de tus actos, podés vivir la vida loca, incluso te facilitaremos el acceso al alcohol y otras sustancias, te proveeremos de anticonceptivos y profilácticos, y si por las dudas, llegara a fallar, tendrás a mano el aborto para ese coágulo/conjunto de células...’ (todo bien pensado por alguien que, tal vez, tenga algún “beneficio”). A medida que van creciendo, algunos jóvenes van comprendiendo LA VERDAD por experiencias propias o cercanas, otros no quieren o no les conviene...


Y ahí están NUESTROS políticos... intentando liderar una sociedad que los formó con pocas dotes de liderazgo positivo... la mayoría más bien aprendieron a amoldarse o acomodarse a la situación general imperante, y aprendieron muy bien a buscar y encontrar el beneficio propio...

HAY políticos con buenas intenciones... pero incluso en la mayoría de ellos, también aprendieron sólo el “corto-placismo”, no es fácil aprender algo que no viviste o no te enseñaron... 


La mayoría de los buenos ciudadanos (se incluye a la mayoría de los “buenos políticos”) interpretan que la pandemia y/o la economía hoy tienen PRIORIDAD... aspectos que se vienen manejando sin verdaderos liderazgos, y cuyos principales defectos han sido la incoherencia y la corrupción.


MUY DIFÍCIL intentar reconstruir una sociedad sin un buen liderazgo...

IMPOSIBLE ejercer un liderazgo sin coherencia...


Entonces, para aquellos que dicen: “tranquilo, ya habrá tiempo para el tema del aborto (e ideología de género), dejá que primero resolvamos algunos temas más IMPORTANTES, despreocúpate que después nos ocupamos...”

PREGUNTO:

¿Existe mayor incoherencia y corrupción intelectual que promover la muerte de los hijos más indefensos y saludables a manos de sus propios padres... y donde además se hace negocios con la propia ejecución, y luego con sus restos...?

¿Alguien espera que de una sociedad que promueve esos valores surjan los “tan ansiados políticos” que nos encausarán como Nación?

En ese contexto, ¿Alguien podrá llegar a pensar que fortalecer la FAMILIA, y estimular la autoestima de TODOS LOS HIJOS (los más deseados, los más o menos, y los menos buscados) podría ser LA LLAVE 🔑 para construir una sociedad más justa, con verdaderos líderes que respeten y promuevan las virtudes sociales, y que respeten y reconozcan nuestras debilidades, con el ánimo de encarar verdaderas soluciones globales, más que personales?

Creo que el EJE de nuestros problemas está en que AÚN los “buenos políticos” NO ENTIENDEN (o al menos no están convencidos) que fortalecer el concepto vida/familia pueda ser un mecanismo para lograr una sociedad mejor, y A PARTIR DE ALLÍ, empezar a resolver TODOS los problemas...

Tengo la impresión que muchos de los “buenos políticos” inocentemente interpretan que el problema PASA POR OTRO LADO, principalmente por la eficiencia mercantilista... que el eje para resolver los problemas del estado argentino, pasaría por conseguir “profesionales MENOS corruptos y MAS eficientes”... y ESO se consigue en el MERCADO... y no en “MEJORES FAMILIAS”... 

Al punto que fortalecer las familias y combatir la ideología de género y el aborto, pueden ser considerados un "factor de negociación" para obtener otros beneficios urgentemente necesarios para "la patria"... Estoy convencido que ese enfoque corto-placista nos mantiene empantanados en un círculo vicioso.

Fortalecer la FAMILIA, tener enfoques REALISTAS de los problemas, pensando soluciones desde el SENTIDO COMUN, es la llave para revertir ese círculo, y transformarlo en un CIRCULO VIRTUOSO. Algunos se decepcionan pensando que el cambio demanda varias generaciones, pero la historia ha demostrado en múltiples ocasiones que cuando se persiguen objetivos con CONVICCION, los resultados se observan mucho antes de lo esperado... en este momento el líder de la principal potencia mundial no para de tomar medidas concretas a favor de la vida. ANIMO! podemos hacerlo, solo de nosotros depende!!

viernes, 19 de junio de 2020

20200618 HOY JESÚS NOS ENSEÑA A REZAR

En el Evangelio de hoy, Jesús le dice a sus apóstoles que cuando quieran rezar lo hagan de la siguiente forma: “enseña/reza el Padre Nuestro”.

Somos hijos del “Padre Nuestro”... ¿CÓMO es este Dios, que no marca una distancia de “inaccesibilidad divina”, sino que nos trata como a hijos y que busca hermanarnos?
Nos dice que fuimos creados a Su imagen y semejanza. Un Dios cercano, que no se muestra inalcanzable, sino como padre, nos hace parte de Su familia.

Si Dios es AMOR, entonces nosotros tenemos la potencialidad de amar, y solo cuando lo hacemos nos parecemos a Dios, nos comportamos a Su imagen y semejanza.

El eje es el amor... un amor que supone diferencias, supone libertad y supone perdón.
En otro momento Jesús nos dice: es fácil amar a quien te ama, pero te invito a amar a quien más te cuesta... ahí expresarás el máximo amor, el más pleno... y te mostrarás a imagen y semejanza de Dios.
Si todos fuéramos iguales, si todos pensáramos igual, no existirían los conflictos... no existiría la necesidad de los “gestos de amor”, por lo tanto, la existencia del amor supone las diferencias, y es el AMOR quien permite la mejor convivencia EN la diferencia, transformándola en enriquecimiento...

“Perdónanos ASÍ como nosotros perdonemos...”
El PERDÓN es eje central del amor, pero también la LIBERTAD de hacerlo o no... Jesús no dice: “perdónanos todos nuestros pecados si nos arrepentimos...” Sino, perdónanos en la medida que nosotros perdonemos...

El Padre Nuestro inicia con alabanzas y reverencias a Dios, luego un pedido del sustento necesario, no de excesos, de lo necesario... luego un COMPROMISO en libertad... y finalmente un pedido humilde de ayuda. Dios nos deja poner la vara... “perdóname IGUAL como yo perdone...”.

Para terminar, otra vez la LIBERTAD de elegir el bien o el mal... no dice que no hayan tentaciones... sino que pedimos ayuda para elegir bien... en libertad, y lograr evitar las tentaciones... evadirlas. En ese logro, en superar las tentaciones, pudiendo haberlas tomado, está nuestra confianza y fortaleza para amar cada vez más, para parecernos a Dios y estar cada vez más cerca de ese Amor Pleno, más cerca de la felicidad eterna.

Cuando rezamos el Padre Nuestro alabamos a Dios, pedimos austeramente nuestro sustento, y asumimos un COMPROMISO... perdonar y elegir el bien en libertad... eso es el AMOR que nos hace semejantes a Dios, que nos hace Sus hijos.

sábado, 6 de junio de 2020

20200606 RELACIONES HUMANAS

¿Alguien puede vivir solo?
Todos necesitamos a los demás... TODOS.
Antropologicamente somos seres sociales, que buscamos la felicidad... y “esa felicidad”, tan buscada, ¿dónde está?

En el camino de "la vida", constantemente elegimos entre dos rutas que se separan... centrarme en mí mismo, o darme a los demás... todos los días, en cada momento, la misma elección, egocentrismo vs darme, compartir...

RELIGIÓN... re-ligión, “volver a ligarme, o reforzar mi ligazón hacia algo”...
JESÚS... alguien que vivió hace mucho tiempo... muchos creen que fue la Encarnación de Dios como hombre, otros que fue un simple hombre de la historia, como San Martín, Napoleón o Sócrates... pero sin duda, aunque algunos busquen minimizarlo y tratarlo como una “antigüedad”, fue uno de los hombres que más influyó en la historia de la humanidad... al punto que universalmente la divide en “antes y después” de Cristo (nos referimos a Aquel que murió crucificado en una cruz en medio de dos ladrones... ¿la peor muerte para el hombre “más importante o de mayor impacto” en toda la historia???) ¿Cuál fue, o cuál habrá sido, su verdadero poder? ¿qué parámetros...?

La vida nos desafía... no es fácil llegar a esa “felicidad social” que tenemos como meta...
Al nacer, vivimos nuestros primeros tiempos en un total egocentrismo, con una madre biológicamente preparada para responder a las “exigencias” de su bebé... el mundo gira a su alrededor... Pero esa mamá, y la familia que arma con el papá (también llamada el 2do útero, ya que nacemos muy inmaduros), SABEN que deben EDUCAR a ese hijo para la convivencia social... para que salga de ese egocentrismo, y madure hacia la convivencia, hacia el compartir... donde se encuentra la “meta” de la FELICIDAD...
Podemos creer en la divinidad de Jesús o no, pero nadie puede negar, que todas sus enseñanzas conducen a ello, a la buena convivencia social, a convivir en el amor:
- Maestro, ¿cuál es el mandamiento más importante?
- Responde Jesús: primero amar a Dios, luego, igual de importante, amar a tu prójimo.

Normalmente no vemos a Dios en forma material, palpable... Jesús nos dice que Dios ES Amor... que fuimos creados a Su Imagen y Semejanza, o sea con esa potencialidad de amar... y que podemos “ejercer” nuestra imagen y semejanza de Dios en el prójimo, que es a quien SI VEMOS... pero con absoluta libertad... podemos elegir amar... o no... o un poco...

Hace poco alguien me decía: “¿porqué Dios permite que, a MI, siempre me toquen las más difíciles...?”
¿Será así?...
A todos nos toca vivir en la combinación entre amar y ser amados... a veces más, a veces menos... ¿de qué depende? Seguramente de muchas circunstancias... algunos nacieron en el mejor ambiente, otros la tuvieron más difícil... pero TAMBIÉN depende de NUESTRA ACTITUD... como dice alguien en algunas conferencias: “las circunstancias suman o restan, pero tu actitud divide o MULTIPLICA”.
Todos pensamos que lo que nos está pasando es lo más complejo, lo más difícil... pero si miramos a nuestro alrededor, descubrimos que siempre hay alguien mejor y alguien peor... solo tenemos que enfrentar la situación...

Pienso que, TAL VEZ, lo primero sea aprender a dejarse amar... y luego amar... y allí empiezan “las soluciones”...
¿Una visión parcial, simplista, naif?
Puede ser... está en cada uno darle o no una oportunidad a esa teoría...
Alguna vez, alguien sabio, cuando le preguntaron ¿cómo curar a un enfermo?, respodió:
- “con mucho amor”
La REpregunta fue de alguien que piensa que esa es una respuesta “naif”:
- ¿y si con eso no alcanza?
- El sabio: “Duplica la dosis”.
Atender con amor INCLUYE estudiar y prepararse, aplicar los conocimientos de la ciencia... y también el trato amoroso... es un combo, que puede verse así o no... la atención médica, puede ser un acto de amor o una transacción comercial... puede acercarse más o alejarse más de uno de los dos conceptos...

Esta mañana tuve el honor de escuchar una muy linda charla, la experiencia de vida de alguien que, con dudas y temores, como todos, eligió el “naif camino del amor”... de a poquito, con miles de problemas diarios a resolver... pero hoy se da vuelta, mira para atrás, y ve que construyó una comunidad de amor, donde se atienden pacientes “terminales” con cariño, afecto y en forma gratuita... ¡UPS! ¿Qué es eso? ¿Es posible?!?!?
Esos testimonios de vida son tan lindos que encienden la llama de la solidaridad... y alguien le preguntaba:
“¿Cómo hago? muchas veces me nace ayudar a otro... pero es como que la dejo pasar...”

¿CÓMO AYUDAR?

Tal vez muchas veces vemos a ese ejemplo de lograr una comunidad de amor que ofrece atención médica gratuita como un Everest imposible de alcanzar... pero para subir cualquier cima se debe empezar por el primer paso... y el ORGULLO no está en alcanzar la cima, sino en ir en la dirección lo más correcta posible, tal vez logremos más o menos de lo que nos pudimos haber planteado... pero como les decía el Papa Francisco a los exEspartanos en proceso constante de recuperación (como todos nosotros y como los mismísimos apóstoles de Jesús): “lo importante no es ‘no caer’, sino ‘no permanecer caidos’”

Tengo una idea loca que es la siguiente:
- cuando participamos, o formamos parte de un evento donde predomina el bien, como puede ser colaborar solidariamente con la buena obra de una ONG, o participar de un Retiro Espiritual, o de los Sacramentos, o rezar... es como que estamos en el “primer nivel” de entrenamiento en el amor...
- el primer nivel, nos prepara para el segundo nivel, que es donde tenemos que dar testimonio... en cualquier trabajo, o cualquier circunstancia social, donde podemos obrar mejor o peor... y dar ejemplo con lo que hacemos... y generar círculos virtuosos o viciosos, de esa forma, contribuimos con un mínimo granito de arena a un mundo mejor o peor...
A muchos nos pasa frecuentemente que “separamos” esos dos primeros niveles (y también los que vendrán después) en algo así como “compartimentos estancos”... o sea, x ej, por un lado “cumplimos” yendo a Misa el domingo, pero luego en la semana, nos vemos “obligados” a olvidarnos de lo que nos propusimos el domingo... “y bueno! ¿Qué querés que le haga? No pretenderás que YO SOLO cambie el mundo...”
Eso nos conduce al tercer nivel...
- en el tercer nivel, nuestra influencia es DECISIVA... mucho más que en el segundo, NUESTRA FAMILIA! Allí, nuestro ejemplo es fuertísimo, tanto en conducta como en conducción... influimos fuertemente en entregar a la sociedad mejores personas o no... influimos mucho!
En mi humilde opinión, hay un 4to nivel de amor.
- el cuarto nivel es el amor de esposos. Elegir a quien ayudaré MÁS en toda la vida. Sobretodo ayudar a ser mejores personas para la responsabilidad de la conducción familiar... máxima entrega terrenal...
- el máximo nivel es la entrega por amor a Dios (visión personal).

Todo empieza por el primer paso... las circunstancias sumarán o restarán, pero NUESTRA ACTITUD dividirá o multiplicará...
Posiblemente el primer paso sea FORMARNOS en el amor...
Pero, entonces... ¿el amor está ahí? ¿en las grandes obras, en formar una ONG? ¿O al menos en las “buenas obras”?
Puede ser que si...
Pero cuidado! Los grandes “hacedores de obras buenas” también tienen sus luchas internas DIARIAS... San Pedro y San Pablo, tuvieron sus “encontronazos”... Esta misma semana conversaba con alguien, a quien admiro, sobre problemas entre personas que impulsan grandes obras solidarias...
El Mismísimo Jesús y San Pedro cruzaron las miradas cuando lo negaba por tercera vez...
Lo extra-ordinario de Jesús, de este Dios de AMOR, es su infinita misericordia y justicia...
Entoces, el punto no son las grandes obras de bien, sino la ACTITUD que pongamos en ellas... salgan o no salgan, crezcan o no, trasciendan o no, se vuelvan conocidas o no...
Nuestras obras no serán medidas en el “éxito humano” que alcanzaron, sino en el amor que pusimos en ellas...
La vida mundana, actual y de todos los tiempos, nos lleva a pensar, o a confundir, que el poder o la acumulación de bienes o dinero, permitiría acceder a la felicidad desde un plano egocéntrico... hasta las buenas obras pueden ser insuficientes, si solo las hago para satisfacer mi ego, o en busca de reconocimiento como único objetivo... todos conocemos historias de personas "vacías" que hasta pueden intentar quitarse la vida rodeados de "riquezas", y al mismo tiempo, personas plenas y felices en medio de la escasez de bienes materiales, pero rodeados de afecto y amor en su entorno...

Esa “buena actitud” de encuentro, hoy lleva un nombre concreto, se la denomina EMPATÍA, y se refiere principalmente a la buena actitud frente al QUE PIENSA DISTINTO... con misericordia, pero también con absoluta justicia, buscando el enriquecimiento mutuo, con honestidad intelectual...
Tal vez el primer paso de las RELACIONES HUMANAS que nos conduzcan a las grandes obras de bien, sea entrenarnos en la EMPATÍA... con todos, los que tenemos cerca y los que están más alejados, en la trinchera opuesta... con TODOS... y humildemente interpreto que las principales llaves de la puerta de la empatía son la alegría y la sonrisa, mientras que las que la cierran serían el mal carácter y el mal humor...
Pienso que, tal vez, el "primer nivel de entrenamiento en el amor" (rezar, los sacramentos, colaborar en buenas obras comunitarias) nos fortalece interiormente y nos da PAZ, que luego se trasluce en alegría y sonrisas para todos los otros niveles... Celebrar la vida, defenderla siempre, en todas circunstancias, con la máxima alegría y compromiso!